Casi todos las personas adultas hemos sentido estos días ansiedad al salir a la calle y seguramente cada vez que vamos al super. Muchas personas han tenido que ir a trabajar con todas las preocupaciones del mundo, y aunque ya vamos acostumbrándonos, la sensación es extraña y fea para todos. Salir a la calle se ha convertido en muchas ocasiones en una gran hazaña o aventura para esquivar al bichito que nos ha cambiado la vida a todos. No solo salir si no también volver a casa y hacer todo ese ritual de limpieza que nos quita las ganas de volver a salir en unos cuantos días, y eso siempre que se pueda!
Despues de muchos días escuchando que se va a «abrir la veda» para niños y niñas, y tras la rectificación que se hizo ayer tarde para que los peques puedan salir a pasear, nos encontramos con un nuevo escenario que preparar. Los niños y niñas dejaron el cole en Extremadura un 13 de marzo y tambien dejaron la forma que conocían de relacionarse en la calle y en el medio. Son muchas las explicaciones, cuentos y demás información que conocen sobre el COVID-19, y ellos mismos están convencidos de que ese bichito es muy peligroso y malote, pues les ha dejado sin ver a sus amigos, abuelos y compañeros de clase, y además, les ha dejado sin salir de casa!!
Muchas voces se han alzado estos últimos días recomendando la prioridad que niños y niñas puedan salir a la calle, aspecto en el que estamos completamente de acuerdo. Un niño sin sol, sin aire libre, expuesto a monotonía de pantallas, deberes y encerrado en casa un día y otro día, se vuelve cada vez más agitado, nervioso e irritable.
Pero, ¿Como les preparamos para esta nueva vida que se van a encontrar? Todo dependerá de la edad y madurez del niño o la niña en cuestión, pues a partir de los siete u ocho años, los niños y niñas pueden mostrarse más receptivos a esta información y actuar con más prudencia, aunque como es lógico, pueden olvidar algunas de nuestras indicaciones por la misma costumbre que nosotros tocamos cosas y tenemos lapsus. Un niño menor de esa edad habrá entendido que hay un bichito, pero no tendrá la misma conciencia y por su propia actividad e inquietud será más dificil de tener controlado.
Tenemos que explicarles que vamos a salir a la calle, pero el hecho de que salgamos, no significa que el bichito haya dejado de estar ahí y por eso tenemos que prepararnos y protegernos. Quizás podamos hacer el simil de algunas profesiones que ellos conocen, «al igual que bomberos y policias se ponen sus súper equipos de protección, nosotros también lo vamos a hacer»,a los más pequeños, podemos decirle, aquello de «vamos a vivir la aventura del científico o del bombero», «preparamos nuestros equipos, guantes antibichito, mascaras de súper heroes». Buscar la originalidad y lo que a ellos más le pueda atraer, será un buen comienzo, al menos para intentar aliviar la ansiedad que ellos puedan sentir. Que se sientan protegidos y que tengan la confianza de que nada malo les va a pasar si toman esas precauciones. Nuestra misión, como padres y madres es estar lo más calmados posible cuando salgamos con ellos, al menos, que ellos no noten la gran tensión que podamos tener por dentro e intentar aconsejarles sin gritarles ni reñirles si se confunden o se tocan. Con mucha calma y firmeza, les debemos decir que el bichito se las sabe todas pero que no lo va a conseguir con ellos o con ellas porque nadie como ellos sabe mejor lo que hay que hacer! Sería conveniente poder escribir una lista de precauciones con cierta antelación a la salidas o grabarles en video diciendo lo que deben hacer cuando salgan a la calle. Por supuesto les felicitaremos por tan gran lección aprendida!
¿Y cuando salgamos a la calle, qué podemos hacer? Pues ahí hay podemos inventar distintos juegos y posibilidades para que ellos puedan entretenerse. Un juego al que muchos papás y mamás juegan con sus niños es «el de no pisar la raya», cuando vamos andando. A muchos niños les encanta saltar para no tocarlas. ¿Por qué no jugar a este mismo juego sin tocar las puertas o los bancos de la calle? Incluso podríamos recompensar sus grandes hazañas al llegar a casa o fabricar una insginia que les de poder y energía, fruto de sus grandes logros!!
Nuestro consejo, es que salgamos con ellos cuando estemos preparados para hacerlo, aunque tengamos muchas ganas de hacerlo, hay que hacerlo con todo el cuidado y la calma que podamos ofrecer.
Mucho ánimo y originalidad, Reinventándonos como Papas y Mamás!!!